Lasaña de espinacas

Llega el fin de semana y por lo tanto podemos perder un ratito más en la cocina para preparar algo un pelín más elaborado. Y digo un pelín por que hoy en día nos dan muchas facilidades. Por ejemplo, la bechamel podemos comprarla hecha, hay algunas marcas que la tienen bastante conseguida. También tenemos la pasta seca precocinada que basta con meter diez minutos en agua templada. Por lo tanto no hay excusa puesto que nos queda hacer el relleno y montar el planto. Bueno al lío.

Tiempo de preparación: 20 minutos

Ingredientes (Para dos personas):

• 8 placas de pasta precocida
• 300 gramos de espinacas
  
• 100 gramos de champiñones
  
• 30 gramos de piñones
• 100 gramos de queso enmental
  
• Tres de cucharadas de tomate frito
• Un diente de ajo
  
• Harina
• Mantequilla
• Aceite de oliva

Preparación:

En un recipiente grande echamos agua caliente y sumergimos las placas de lasaña. Las dejamos unos diez minutos.

Mientras ponemos una sartén, con un par de cucharadas de aceite de oliva, en el fuego y echamos el diente de ajo cortado en láminas. Cuando se empiece a dorar, echamos los champiñones y los piñones y los dejamos un minuto. Añadimos las espinacas, (si son congeladas las habremos descongelado previamente en el microondas), dejándolas al fuego unos tres minutos, tras lo cual añadiremos las cucharadas de tomate, mezclaremos bien y lo reservaremos para montar el plato.

Si vamos a hacer la bechamel tan solo tenemos que seguir los pasos dados en el post de salsas. En el caso de que la compremos hecha seguiremos las instrucciones del envase para calentarla.

Llega el momento de montar la lasaña. Para ello en un recipiente resistente al horno cubriremos el fondo con una fina capa de bechamel y pondremos las primeras placas de pasta (una por persona). Extenderemos por encima una parte de las espinacas y a continuación otro poco de bechamel. Taparemos con otra placa de pasta. Volvemos a echar las espinacas y la bechamel. Repetiremos de nuevo ese proceso. Finalmente pondremos la última capa de pasta, lo cubriremos con el resto de la bechamel y echaremos el queso.

Solo nos queda meterlo al horno, previamente precalentado a 220 º en la opción de gratinar, durante unos 4 minutos. O hasta que el queso este dorado a nuestro gusto.

El truco para que la lasaña quede como la de la foto es echar más relleno en los bordes de la placa de pasta y menos en el centro. Basta con echar las espinacas y con las manos hacer una especie de volcán. De esta forma la capa superior quedará totalmente recta.